Bien mirado, estas cosas no son tan raras como parecen. Al menos, a mí
no me sorprenden. Pues qué cabe esperar de todo este delirante 'suma y
sigue' liberticida en el seno de nuestra asociación, culminado con la
celebración de la Asamblea del pasado domingo y que no resultó ser más
que la burda representación de una premeditada farsa protagonizada por
-fijaos bien- qué 'ingeniosos' actores subvencionados de sí mismos en su
posición de absoluto, tiránico dominio de los medios de comunicación
interna entre los asociados, como si jefezuelos del 'Estado de partido
único', 'su' MCRC, contra su razón, la sociedad, la reunión de todos los
que hasta aquí llegamos convocados por la llamada de la libertad
política colectiva.
Manuel Vivancos